Crecí en una familia rodeada de amor, donde me inculcaron que debemos ayudarnos los unos a los otros; de ahí nace mi entusiasmo por esta profesión. Formada en un ambiente de esfuerzo y excelencia, logré completar el sueño de ser médico, y esa ha sido la mejor decisión de mi vida. Ayudar a las pacientes es muy gratificante, y ver sus sonrisas cuando encuentran consuelo, hace que todo valga la pena.
Esta pasión me ha llevado a estudiar profundamente la salud de la mujer, a capacitarme constantemente y a dar lo mejor de mí para brindar un servicio de excelencia. Me enamoré de la Ginecología y la Obstetricia desde que era estudiante, me apasiona poder estar en una área de la medicina que nos permite desarrollar habilidades en diferentes campos como en la clínica, el ultrasonido, en el área quirúrgica, la colposcopía y en el control de los embarazos.
Esta especialidad me permite ver el milagro del inicio de la vida; y que otra bendición más grande que esta, siempre acompañada de la guía de Dios en mi trabajo.